Ha habido hombres importantes en su vida. Hombres de los cuales aprendió. Unos por su vocación a la instrucción, otros ni siquiera se imaginan que le enseñaron algo. Pero la constante en la vida de la escritora han sido las amigas. Sobre todo en días de crisis. Así que le pedí permiso para compartir con ustedes un correo que envió a sus amigas en navidad del 2009. La intensión y el deseo no han cambiado ni un poquito.
“Cada una de ustedes es un ser especial. La amiga en España que salió en mi defensa cuando más susceptible estaba y sin que yo se lo pidiera. La homónima por su espontaneidad contagiosa. La que me envió un telegrama hace 24 años y que todavía guardo, ejemplo de fortaleza. La que me acompañó cuando me operaron y temblaba como una hoja, su hermana que me acogió por referencia. La amiga que me introdujo en las artes de la paciencia con paciencia. La que me llevaba de compras y sin darse cuenta me enseñó lo que significa "seguir adelante". La amiga que me adoptó en su casa en las fiestas especiales y lloró conmigo la muerte de mi padre. La amiga que descubrió que yo también puedo discutir por 20 minutos sobre donde va una coma y que heredó mi tetera. La amiga que adoptó a Lupe, mi planta, y que la ha hecho tan feliz en su casa. La amiga que me permitió el honor de soplarle el secreto de que es buena escritora. La amiga reencontrada, aunque al juntarnos a almorzar no pareciera que estuvimos separadas. La amiga que busqué a través del internet y retomamos la vida justo donde se había interrumpido. La amiga que ahora vive allá, en la esquina del mapa continental, y que tanto admiro y apenas ahora se entera. Mis hermanas, que son también mis amigas, ejemplo de entereza y solidaridad. Mi prima que también es mi amiga, por la niñez compartida y por prestarme a sus padres, para jugar de vez en cuando a que no soy huérfana.
NOS deseo a cada una salud. Oportunidades de éxito y que sepamos aprovecharlas. Que sigamos siendo agradecidas. Que aprendamos a darnos el valor que de verdad tenemos. Y que saquemos siempre tiempo para compartir con las amigas.
Bendiciones Infinitas”
Algunas de las respuestas que recibió la escritora…
• Después hablamos, ahora se me saltaron las lagrimas… estoy mantequilla. Te quiero por siempre. Felices siempre.
• Amiga:
Aunque no tengo el don de la palabra como tú, te quiero mucho y deseo que el Niño Jesús te traiga un 2009 lleno de salud, éxito y armonía. Las historias de amigas son siempre las más sinceras y hermosas. Yo atesoro nuestras maldades en España, llenas de ilusión y música de Silvio.
• Wow! Que bello y especial; me encantó, una vez más orgullosísima de ti. Te Amo, no sé si lo sabes pero mi mejor amiga eres tú y mi mentora.
• A la verdad es que no eres una escritora común y corriente. Eres una escritora con sentimiento genuino y con vivencias que no son prestadas. Que Dios siga iluminándote e ilustrándote el camino para que sigas, en tu andar, dándole Gloria.
Que Dios te bendiga.
• Esta semana tomé una foto de la puerta de tu apartamento desde el pasillo. Como quisiera encontrarte detrás de ella. Te echo de menos....
• PD: todos los días tomo té, todos los días me acuerdo de vos.
¡Qué bueno que la escritora tiene AMIGAS!
